1785. Hutton y el uniformitarismo
Fueron los geólogos, más que los biólogos, quienes prepararon el camino para la teoría moderna de la evolución. Uno de los que tuvieron mayor influencia fue James Hutton (1726-1797). Hutton propuso que la Tierra había sido moldeada, no por hechos repentinos y violentos, sino por procesos lentos y graduales: el viento, el clima y el fluir del agua, los mismos procesos que pueden verse en acción en el mundo actual. Esta teoría de Hutton fue conocida como "uniformitarismo". El uniformitarismo fue importante por tres razones. Primero, implicaba que la Tierra tiene una larga historia, lo cual era una idea nueva para los europeos del siglo XVIII. Los teólogos cristianos, contando las generaciones sucesivas desde Adán (como se registra en la Biblia) habían calculado que la edad máxima de la Tierra era de aproximadamente de seis mil años. Según sabemos, nadie, desde los discípulos de Anaximandro (611-547 a. C.), había pensado en términos de un período mayor. Anaximandro sostenía que la Tierra era infinitamente vieja. Sin embargo, seis mil años era un tiempo demasiado corto para que hubieran tenido lugar los principales cambios evolutivos, cualquiera fuese la teoría. Segundo, la teoría del uniformitarismo afirmaba que el cambio es en sí el curso normal de los acontecimientos, por oposición a un sistema estático interrumpido por un hecho ocasional e inusual, como por ejemplo, un terremoto. Tercero, aunque esto nunca fue dicho expresa y claramente, el uniformitarismo sugirió que podría haber alternativas a la interpretación literal de la Biblia. Hutton publicó sus conclusiones en 1785, en su libro Teoría de la Tierra. No pudo estimar exactamente la edad de nuestro planeta, pero dejó en claro que era muy antiguo.
Véase también: cap. 17