Introducción. Acerca del metabolismo
Entre las características que definen la vida, podemos destacar una fundamental: los seres vivos intercambian sustancias y energía con el medio externo, es decir, funcionan como un sistema abierto. Las sustancias que se incorporan a un organismo ingresan en una red de reacciones químicas en donde se degradan o se utilizan para la construcción de compuestos más complejos. Los organismos vivos también son expertos en la conversión energética. La energía que ingresa, ya sea en la forma de luz solar o de energía química almacenada en los alimentos, es transformada y usada por cada célula individual para el trabajo celular. Este trabajo incluye el dar energía no sólo para los numerosos procesos que constituyen las actividades del organismo, sino también para la síntesis de la enorme diversidad de moléculas y estructuras celulares. La energía puede adoptar diferentes formas. El conjunto de reacciones químicas y de transformaciones de energía que involucran la síntesis y la degradación de moléculas relativamente simples constituyen el metabolismo. A lo largo de la historia, cada paso metabólico, cada vía y cada proceso general surgió como resultado de numerosas investigaciones que representaron muchos años de estudio.